Del largo repertorio de viejitas pero bonitas, les recomendamos la siguiente película que creo que como muchas inspiradas en la Segunda Guerra Mundial, te hará reflexionar sobre el mismo actuar del hombre, dejándote saber que la desgracia, la injusticia, la falta de valores no son obstáculo para poder vivir la fe en una entrega total.

Aunque el nombre de la Película es Maximiliano Kolbe, la historia inicia en cómo sobrevive un prisionero de nombre ficticio llamado Jánas (Christoph Waltz, ganador de 2 premios Oscar) mientras escapa de las garras de los nazis a finales de julio de 1941, y uno se preguntaría ¿Esto qué tiene que ver con Maximiliano Kolbe?. Pues déjame decirte que TODO.

Una de las leyes nazi durante la guerra era que por cada prisionero que escapara 10 hombres serían asesinados, encerrados hasta morir de hambre y es aquí donde avanzada la película se descubre quién es este santo al ofrecerse como voluntario en vez de un hombre del que se supo tenía esposa y 3 hijos.

Encerrado en una celda, el sacerdote alentó en la fe a sus compañeros, con oraciones y cantos hasta que poco a poco fueron falleciendo, siendo él, el último y donde los nazis decidieron acabar su vida inyectándole ácido carbólico.

Jánas logra esconderse como monje franciscano por un tiempo en lo que le consiguen una identificación falsa, pero en ese mismo tiempo descubre la muerte heroica del Padre Maximiliano Kolbe y empieza a tener interés en cómo una persona estando en esas situaciones logró entregar su vida para que otra persona pudiera vivir; Jánas sin darse cuenta conoció a diferentes personas que escucharon y siguieron al Padre Maximiliano Kolbe.

Es una película ampliamente recomendada si estás dispuesto a ver una historia de heroísmo verdadero dentro de la guerra, si quieres adentrarte en analizar qué motiva a un hombre entregar su vida por la de alguien más, pero sobretodo esta película debe ser un impulso a conocer más de él y no limitarte a la película y conocer la vida de un sacerdote que misionó en Japón, que ama profundamente a la madre de Dios, que donde los demás veían cosas imposibles, agarrado de su fe lo hacía posible.

San Juan Pablo II, un año después de su elección, en Auschwitz, dijo: «Maximiliano Kolbe hizo como Jesús, no sufrió la muerte sino que donó la vida». La expresión remite a unas palabras escritas por el padre Kolbe unas semanas antes de que los nazis invadieran Polonia (1 de septiembre de 1939):

«Sufrir, trabajar y morir como caballeros, no con una muerte normal sino, por ejemplo, con una bala en la cabeza, sellando nuestro amor a la Inmaculada, derramando como auténtico caballero la propia sangre hasta la última gota, para apresurar la conquista del mundo entero para Ella. No conozco nada más sublime».

Datos que rescato tanto de la película como de este santo:

  1. Dentro de campo de concentración, no sólo había judios, si no también hombres justos, en contra de la guerra, católicos y sacerdotes, pero sobre todo santos.
  2. La película se queda corta al mostrar quien es Maximiliano Kolbe, no porque sea una mala película, sino todo lo contrario, la película de cierta forma muestra continuamente sucesos interesantes donde te hace querer saber más sobre este misterioso y conocido hombre a la vez por todos los que comparten su testimonio.
  3. Me enseñó hasta que punto uno debe de dejar de evangelizar y dar testimonio: “hasta el último suspiro”.
  4. La grandeza y admiración de Maximiliano Kolbe, más que sus palabras fueron sus hechos (Mt 7; 16 “Por sus frutos se les conocerá”), siendo Jesús el fruto y alimento más grande para todos los prisioneros y hombres que estuvieron a su alrededor.
  5. No hay registro de que Jánas sea la persona que logró escapar de los nazis, pero si refleja a toda una generación de sobrevivientes que se cuestionaba sobre si hay algo más en este mundo y si ese ALGUIEN también quiere algo de mi.
  6. Aunque este dato no sale en la película, en el 2008 la Iglesia lanzó en Colombia la llamada “Operación Kolbe”, donde personas voluntarias se ofrecían a cambio de las personas que están secuestradas a imitación de San Maximiliano Kolbe.
  7. Si deseas ver la pelicula, da click en el siguiente link 

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Davidtarin

David es psicólogo, le gusta gusta bailar e ir al cine, pero sobretodo es fan de Dragon Ball. Ser misionero es esencial en su vida, le gusta estar con la gente y poder aportar y compartir lo que Dios le ha regalado. siente que el sentido de su vida esta en ayudar a otros a encontrar el sentido de su vida, encontrar a Cristo en los ojos del prójimo es su misión por lo que le encanta conocer y platicar con la gente.

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