Hace días vi un documental que hablaba sobre la cultura del consumismo en la que estamos viviendo, cultura que muchos hemos adoptado sin siquiera darnos cuenta. En lo personal estaba consciente de esta realidad, pero ver en este documental, imágenes, cifras y estudios de esta situación realmente me causo tristeza.
El consumismo nos “consume”
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Y es que a todos nos esta pasando, la publicidad se ha infiltrado tanto en nuestras vidas que se dedica a vendernos la idea de que tener el celular mas nuevo, el carro mas moderno, el viaje mas caro o la ropa mas bonita nos hará mas felices, pero ¿realmente es culpa de la publicidad? Los que se dedican a esta profesión únicamente hacen su trabajo, los de la culpa somos nosotros que nos tomamos tan en serio estas ideas al punto de desconectarnos de nuestro alrededor enfocándonos en estos bienes materiales.
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Vivimos en una ilusión de querer mas y mas, anhelamos comprar la ultima versión de un celular y después queremos una funda que lo haga verse mejor por mas cara que sea, compramos ropa y después queremos comprar un buen calzado que la acompañe, logramos irnos de viaje y estando en el lugar de destino queremos comprar todo aquello que después nos recuerde que estuvimos ahí, nada es suficiente, no logramos percibir los pequeños detalles que la vida nos da porque estamos enfocados en los grandes lujos que el mundo nos ofrece.
Queremos ser menos infelices , no más felices
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Buscamos todo esto para ser menos infelices y darle mayor significado a nuestras vidas. Quiero aclarar que poseer bienes materiales no esta mal, ni es pecado, pero si poco a poco esto nos importa mas que amar a nuestro prójimo entonces si estamos cometiendo un grave error. El verdadero problema de esta situación es que nos estamos olvidando de lo que Dios nos regala en nuestro día a día, El nos ofrece cosas mas valiosas que ni siquiera el dinero puede comprar.
Tenemos que cambiar
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Simplemente el levantarnos, poder ver el sol, escuchar tu respiración, caminar, ver a tu familia desde el primer momento del día, son situaciones que están pasando desapercibidas por estar pensando en que te vas a poner, que foto vas a publicar o a que lado de moda iras a comer. Entendámoslo de una vez, todo eso tiene que pasar a segundo termino, fíjate bien en tus amigos que son personas increíbles, en tu mama que no se cansa de darte amor, en el cielo que te acompaña camino a la escuela o al trabajo, para que querer mas si todo ello traen alegría y paz a tu vida. Disfrutemos la vida como Dios nos pide, dandole alas a nuestra ilusiones y viviendo profundamente nuestras mas grandes y raras emociones, eso es lo que verdaderamente nos da significado.
La vida esta hecha llena de experiencias que nos fortalecen, Dios tiene un camino sorprendente para nosotros que solamente podremos disfrutar si dejamos de voltear hacia abajo al celular. Rompamos nuestras ataduras a lo que esta de moda o a lo que todos traen y dispongámonos únicamente a amar porque esta es la formula exacta para que nuestra paso en esta tierra sea realmente satisfactorio. Y nunca olvidemos que no necesitamos nada mas que a Dios y Dios basta!
Por Fer de la Fuente
